Cuidado del Producto

Las joyas son diseños delicados que necesitan un cuidado especial y un almacenamiento adecuado. Asegúrese de quitarse y guardar sus joyas antes de realizar trabajos que impliquen contacto con sustancias químicas o trabajos que puedan dañar la superficie o la forma de su pieza.


Una joya puede dañarse al realizar actividades o tareas cotidianas como la jardinería, lavar los platos o hacer deporte. Asegúrese de quitarse las joyas de antemano y guárdelas en un lugar seguro. Esto ayudará a prevenir cualquier daño y preservar la pieza.


Exponer las joyas a líquidos domésticos, perfumes, temperaturas extremas y cosméticos puede hacer que el oro se decolore o posiblemente se desintegre cuando entre en contacto con los productos químicos más fuertes que se usan en los agentes de limpieza y puede dañar gravemente las piedras preciosas.


Le recomendamos que evite usar joyas durante actividades que puedan exponerlas a riesgos de daño. Entre usos, recomendamos colocar su pieza en el estuche original o en otra caja o bolsa adecuada, ya que el polvo y la contaminación pueden opacar el brillo de las piedras preciosas, así como el brillo de los metales preciosos como el oro o el platino.


Se recomienda la limpieza profesional de sus piezas una vez al año o dependiendo de la frecuencia de uso de las joyas. La mayoría de las piezas se pueden mantener con un limpiador no abrasivo entre servicios profesionales. La limpieza ultrasónica no es segura para muchas piedras preciosas, por lo que no recomendamos este método de limpieza.


Examine sus joyas con regularidad para asegurarse de que las monturas mantengan las piedras preciosas en su lugar de manera segura y si los cierres y las uniones son seguros. Los ajustes de puntas son especialmente delicados. Si se golpean o se enganchan en la ropa, pueden aflojarse. Las puntas, las uniones o los broches dañados pueden ocasionar la pérdida de una piedra o de una pieza de joyería completa.


Recomendamos precaución al manipular todas las joyas, sin embargo, algunas piedras preciosas requieren un cuidado especial. Muchas piedras como la amatista, la esmeralda, el ópalo, la perla, el peridoto, la tanzanita y la turmalina son muy delicadas y se desgastan fácilmente.


Si necesita ayuda o si tiene alguna pregunta adicional al recibir la pieza, no dude en ponerse en contacto con nosotros. Nuestros artesanos tienen conocimientos y experiencia en el cuidado y la reparación de joyas y estarán encantados de ayudar con cualquier dificultad que pueda surgir.